El trabajo, teórico y práctico, se desarrolló ayer en horas de la tarde en las instalaciones del Tiro Federal. El jefe de la URII, comisario mayor José Alberto Morales, explicó los objetivos de la capacitación orientada a quienes deben estar a cargo en este tipo de situaciones, hasta la llegada de los equipos especializados en dichos incidentes.
Morales señaló que la actividad desarrollada “es una jornada orientada a jefes fundamentalmente de la URII, que van a bajar de todas las comisarías del interior que dependen de esta Unidad Regional. La capacitación es dictada por personal preparado, personal idóneo del EDAI de nuestra Policía”.
Y agregó: “Vienen un psicólogo y un efectivo policial, que están como negociadores, y ellos han recibido capacitación incluso a nivel nacional con la Policía de Delitos Complejos de Buenos Aires, donde también tuvieron intervenciones a modo de prácticas en hechos reales en Buenos Aires”.
El funcionario policial recordó que “nosotros tenemos un protocolo en toma de rehenes, o como puede ser una persona atrincherada, armada en un lugar. Tenemos un protocolo que tenemos que tener aprendido y saber cómo aplicarlo como jefes de una dependencia”.
Y acotó en tal sentido que “estas jornadas son a modo de poder refrescar le memoria y ver si podemos dejar en claro, si nos llegara a tocar, qué es lo que tenemos que hacer desde el punto cero, cuando se inicia esta situación y hasta el final, un final drástico, o no, porque siempre se busca que termine de la mejor manera”.
Morales sostuvo sobre este tipo de situaciones que “ojalá nunca nos ocurra, no estamos acostumbrados a que en la provincia sucedan estos hechos, pero en el supuesto caso que pase, porque puede ser un delincuente que va a cometer un asalto y venga llegando el policía, termine agarrando a la víctima de rehén en algún negocio, o también puede ser una situación que se puede desprender esto, o un conflicto de género”.
El titular de la URII explicó que “cuando hablo del punto cero, es que el jefe de jurisdicción conoce ese protocolo, qué tiene que hacer y que no, hasta que llegue el resto del personal. Supongamos que ocurra en Realicó, el primero que va a intervenir es el jefe de la Departamental de Realicó y el policía que va a la presencia, pero el que va a tomar el mando es el jefe de la dependencia, entonces Él va a tener que ir viendo cómo va resolviendo si se extiende, hasta tanto lleguen los equipos como pueden ser el Grupo Especial”.
Y agregó: “También cuando sucede esto se convoca a la autoridad judicial, como el fiscal, y de ahí se arma un comité de crisis y el referente viene a ser el jefe de Unidad Regional. El comité de crisis que se arma cuando el hecho es prolongado, una situación que pasan horas. Siempre se busca un corte, pero siempre se busca que sea el mejor, el menos dañino como para que no salga lastimada la víctima de rehén, y tratar de capturar al delincuente vivo y sin lesiones”.
Sobre el contenido concreto de la capacitación, Morales explicó que “en la parte teórica nos van a dar algunas cosas nuevas que surgieron, porque siempre surgen y nos vamos modernizando, y también revisamos los conocimientos y si tenemos dudas nos las sacamos. Después se va a hacer la práctica en un simulacro que ya hemos hecho el año pasado, que consiste en dos situaciones, una donde el delincuente culmina entregándose y la otra donde no se entrega y el Grupo Especial es el que irrumpe y se hace cargo de la situación”.
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